entrada del nuevo ninja

Despues de la pequeña disputa con el lider me marche del bosque pensando en que aldea podria volver hacer mi vida, no tenia ni idea de a cual ir y decidi ir hacia ninguna direccion concreta asta encontrar una aldea, despues de varias horas saltando de rama en rama pude ver un camino a lo lejos el cual decidi seguir, seguro que habria una aldea cercana por esta zona y iria haber si podria entrar, mientras avanzaba por el camino pude ver como un arco el cual parecia la entrada a una aldea ya que ponia algo arriba del arco pero no podia distinguirlo, cuando estaba un poco mas cerca ya podia ver con claridad lo que ponia en el arco: "Konoha", y enseguida pense " esta sera mi nueva aldea intentare darlo todo por la aldea".
Al llegar al gran arco me pare antes de entrar mirando toda la aldea y poco a poco decidi entrar para ver como era la aldea.

-Cuando ya iba entrando de pronto.. un ninja de otro lugar divise por la puerta, decidí ir a verlo yo, ya que había estado muy ausente en mi aldea y no sabría mucho "recibir" por decirlo, osea significaba que quería ser mas sociable con todos allí y también con los nuevos ninjas de aldeas.
-Entonce me dirigí a la puerta, observe de inmediato al nuevo, vi que los jounnin's que cuidaban también lo miraban, pero sospechosamente, vi en su frente la banda de su aldea, pero había algo extraño, su signo de aldea estaba rayado, pensé en ese mismo instante "un renegado", me apresure a verlo, cuando estaba frente a el, puse mi mano para que se detuviera, el al parecer lo hizo entonces proseguí a preguntar.
-¿Quien eres?, ¿Que buscas?.
-De inmediato mis ojos se tornaron de un color rojo, al centro de color negro, por los lados de este centro tres aspas se dejaban ver, -Sharingan 3 aspas- , no quería invasores, renegados, exiliados en mi aldea, por lo que pensé en detenerlo de inmediato, y si tenia que pelar, lo haría.

-Ya cuando me preparaba nuevamente a a dirigir la palabra a ese ninja, el tal renegado, observe de prisa venir alguien, "el Otokage" pensé enseguida mientras ya lo veía ahí, solo se encontraba a unos metros de allí, me pregunto algo de enseguida, yo respondí.

-Claro, todo esta bien.

-Al momento de yo responder el pregunta algo al otro shinobi que se veía ya envuelto en una capa de arena que el mismo otokage había preparado muy rápidamente, me dispuse a dirigir la palabra al shinobi.

-¿Cual es tu nombre?.

-Le dije cuando miraba a él dentro de la arena, dijo algo antes ... algo que me llamo la atención "acabo de ser retirado de la organizacion taka", me impresione pensando por que alguien podría querer de un día para otro volverse bueno, y si ah asesinado gente...

-Alguien de taka... en Konoha, no creo que sea muy convincente.

-Era algo que pasaba pocas veces en mi aldea, tal vez el solo quería una nueva aldea y eso, pero también tal vez quería solo atacar y destruir por dentro, no dejaría que lo hiciera por eso preguntaba cada cosa con agudeza, y lo miraba con atención a los ojos, por si algún movimiento en falso, en un genjutsu de mi sharingan caería.

-Solo escuchaba lo que decía el otokage y el ninja, la suave brisa del lugar golpeaba mi rostro mientras yo solo me quedaba allí observando el lugar y a los dos shinobis hablando, ya luego de un momento el renegado dijo su nombre, que quería hacer, etc. Al fin parecía ser un poco convincente para mi, yo ya con más tranquilidad le dije a él, sin moverme.

-Creo... que ya me comienzas a simpatizar, jeje.

-Cerré mis ojos y los abrí, el sharingan ya se había desaparecido de mi mirada, significaba que ya no tendríamos porque pelear, sus intenciones parecían ser buenas, entonces ya me prepare.

-Otokage, creo que debería soltarlo, no tiene malas intenciones, bienvenido a Konoha "Tiriliri".

-Dije con más alegría y con una pequeña sonrisa en la cara, pues tendría un nuevo ninja, y este parecía tener experiencia, ademas el podría ayudarnos con Takas y o Akatsukis, quizás sabía mucho, seria de ayuda, eso era un punto a favor para nosotros y todos los demás kages de aldeas.

-Ya luego de estar allí decidí marcharme diciendo a los dos -Nos vemos-, fue algo corto... me marche despacio por si querían decirme algo, pensé.